El espíritu de Shoshinshakai es el fomento de la práctica del aikido, principalmente en la zona norte de Madrid. Para ello hemos creado esta asociación – en su origen Club Aikido Alcobendas – de forma que en nuestro papel de Asociación deportiva sin ánimo de lucro tengamos los mismos derechos y deberes -y por lo tanto de oportunidades – que cualquier otra actividad deportiva competitiva. Nuestra asociación se rige, como es preceptivo, en unos Estatutos, a disposición de aquel que esté interesado en leerlos.

La historia de nuestra asociación comienza en el año 1996 cuando nuestro actual presidente honorario Antonio Marquiegui tomó la iniciativa de formar un grupo para la practica del aikido en Alcobendas. Posteriormente, otras personas fueron añadiendo al esfuerzo inicial de Antonio su empuje renovado, de forma que, después de muchos avatares, en junio de 2002 ve la luz el Club Aikido Alcobendas, rebautizado con el nombre de SHOSHINSHAKAI – Aikido Alcobendas , o lo que es lo mismo en castellano:”Asociación de principiantes”.

Debemos pues agradecer al esfuerzo de muchas personas el que actualmente nos encontremos formando un grupo, que aunque ciertamente aún pequeño en número, unido y convencido de nuestro objetivo.

Asimismo, debido a la filiación técnica de nuestro actual instructor, quedamos encuadrados, en el ámbito organizativo del aikido nacional, dentro de la Asociación Española de Técnicos de Aikido, con la que cumplimos individualmente como socios además de seguir con placer y orgullo las directrices de práctica marcadas por Tamura Shihan.

Mantenemos sin embargo, debido a nuestra propia entidad jurídica, órganos de gobierno propios encarnados en la Junta Directiva de Shoshinshakai, anualmente renovada.

En 2017 pasamos a formar parte de la potente asociación de San Sebastián de los Reyes que engloba a los más importante clubes deportivos de nuestra ciudad, la ACDSSR – Asociación de Clubes Deportivos de San Sebastián de los Reyes – con lo que esperamos potenciar el conocimiento que de este arte se tiene en nuestra ciudad y en la región.

 

Independientemente de nuestra elección técnica y organizativa, mantenemos excelentes relaciones con otros grupos, que adscritos a otras escuelas u organizaciones, nacionales e internacionales, como nuestros clubes hermanados de Cremieu e Irigny, que practican con rigor y entusiasmo.

Creemos con firmeza que el aikido debe ser armonía y trabajo continuo, y entendemos en nuestra concepción de aquel que la libertad de elección en cuanto a maestro o escuela es un derecho necesario y deseable, sin que ello tenga que suponer el enfrentamiento con otras tendencias o grupos.

Bienvenidos por lo tanto a todos aquellos que deseen informarse de la práctica del aikido, o los que, siendo ya practicantes, encuentren grato nuestro enfoque de trabajo.